Uno de los aspectos básicos del cuidado de la piel es la hidratación. Una buena hidratación se consigue mediante la ingesta de entre 1,5 litros y 2 litros de agua y otros líquidos (zumos, infusiones, leche, caldos, etc.). Además, algunos alimentos como las -frutas y las verduras están compuestas por un 80-90% de agua, por lo que son muy importantes en la hidratación de la piel. Por otro lado, los nutrientes más influyentes en el cuidado de la piel son:
Vitamina E Posee efecto antioxidante, por tanto, neutraliza la acción de los radicales libres que producen el envejecimiento de la piel. Los radicales libres en verano aumentan por la acción de los rayos solares y provocan manchas de envejecimiento. Alimentos: aceites vegetales como el aceite de oliva, frutos secos y vegetales de hoja verde.
Vitamina C Posee efecto antioxidante y contribuye en la producción de colágeno, que mantiene la piel tersa y sin arrugas. Alimentos: frutas (kiwi, cítricos, melón, fresas, frutas tropicales, etc.) y verduras, mejor en crudo o al vapor, (pimiento, tomate, etc.) Provitamina A (beta-caroteno) Posee efecto antioxidante. Alimentos: verduras de hoja verde, verduras y frutas de color rojo, naranja o amarillo (zanahoria, calabaza, pimiento rojo, tomate, albaricoques, cerezas, melocotón, etc.)
Vitamina A Contribuye en la renovación de la piel y de las mucosas. Alimentos: presente en alimentos de origen animal (hígado, nata, mantequilla, yema de huevo, lácteos) y a partir de la transformación de la provitamina A.
Vitamina B2 Actúa contra la seborrea. Alimentos: leche y derivados, huevos, carnes, pescados, hígado, legumbres y frutos secos.
Vitamina B3 Contribuye en la síntesis de la queratina, que constituye el componente principal que forman las capas más externas de la piel, pelo y uñas. Alimentos: carnes, pescado, vísceras, cereales integrales y frutas desecadas.
Vitamina B5 Contribuye a la eliminación de las espinillas y forúnculos que se forman en la piel de adolescentes y adultos que sufren de acné. Esto se debe a que la vitamina B5 contribuye a un afinamiento de la piel y una reducción del tamaño de los poros. Alimentos: hígado, vísceras, carne de ave, huevos, brócoli, tomates, patatas, hongos y legumbres.
Vitamina B6 Relacionado con el metabolismo del zinc, mineral que forma parte de la piel. Alimentos: pescado azul, carne, huevos, frutos secos, cereales integrales, plátano, espinacas.
Ácido fólico (vitamina B9) Contribuye en la renovación celular de la piel. Alimentos: verdura de hoja verde, legumbres verdes, frutas, hígado.
Selenio Acción antioxidante. Relacionado con un menor riesgo en la aparición de ciertos tumores, entre ellos el de piel o melanoma. Alimentos: carne, pescado, marisco, cereales, huevos, frutas y verduras.
Zinc Favorece la formación de nuevas proteínas (renovación celular), participa en la lucha contra los radicales libres, favorece el buen estado de la piel y las mucosas, proporcionando tonicidad y elasticidad a la piel. Alimentos: carnes, vísceras, pescado, huevos, cereales integrales y legumbres.
Hierro Contribuye a la coloración de la piel. Un déficit de hierro da lugar a una piel pálida, debido a la disminución de hemoglobina en la sangre. Alimentos: vísceras, carnes, pescado, huevos, frutos secos y desecados, legumbres y verduras de hoja verde. En vegetales y en el huevo, se encuentra en forma no hemo. Por tanto, es recomendable tomarlos con alimentos ricos en vitamina C, que contribuye a un mejor aprovechamiento del hierro.
Azufre Contribuye en la síntesis de queratina y tiene acción anti-seborreica. Alimentos: huevo, leche y derivados, cereales integrales, levadura de cerveza.
Proteínas Forman parte de la piel. Alimentos: carne, pescado, huevo, lácteos y derivados, legumbres, cereales y frutos secos.
Grasas Contribuyen en el mantenimiento de una piel bien estructurada, tersa e hidratada. Alimentos: aceite de oliva y aguacate, ricos en ácidos grasos monoinsaturados; y aceites de semillas, frutos secos oleaginosos y pescado azul, ricos en ácidos grasos poliinsaturados.
Para finalizar, hay algunos males cutáneos que se agravan con ciertas comidas: Acné se vincula con los triglicéridos. Rosácea (enrojecimiento, granos o espinillas y en etapas más avanzadas, el engrosamiento de la piel) se relaciona con el alcohol y los alimentos picantes. Eczema suele relacionarse con los huevos, los cacahuetes, la soja, y ciertos pescados.
